Todos los días de mi vida

+ Joder estas aqui y no allí. Estás bien?
- Ya esta, se acabo, me rindo.
+ Nunca debes rendirte
- No, si. Si ese fuese nuestro destino, estariamos juntos. Ahora pensaba en la primera vez que fuimos aqwuel restaurante griego de la esquina, tenía una gran pizarra que ponia "ya servimos sopa" y yo le solte un gran rollo sobre todos los obstaculos que el dueño debió tener para superar el sueño de su vida de servir sopa, y entonces cuando termine, ella no dijo nada y luego como en un suspiro lo exhalo, casi como para si misma. Te quiero, era la primera vez que lo decía y yo no podía ni responder, solo quería volver a oírlo. Eso fue dos semanas después de conocernos. Solo tardo dos semanas en enamorarse de mi la otra vez. Ahora no me ama.