La verdad ya no sé nada. No sé si te vas, si te quedas, si me quieres, si me odias, o si te es indiferente todo lo relacionado a mí. No sé si debería estar enamorada de ti o si debería intentar olvidar, no sé si al verte ir corriendo a abrazarte, o hacer como si fueras invisible, no sé si preguntarte si quieres venir a dar una vuelta, o mejor esperar a que un día tengas humor y me llames. ¿Por qué tantas dudas y preguntas? ¿Y por qué sé que no me vas a contestar a ninguna? Y es que tal vez piense que está llegando el final de toda esta aventura...
Porque al mirar nuestras fotos o escuchar nuestra canción se me hace un nudo en la garganta y las lágrimas se van apropiando de mis ojos. Estoy intentando hacer lo correcto, elegir el camino y acciones adecuadas, para así intentar alargar más el final, y tal vez en vano, porque sé que me iré muy lejos, y tal vez no volveremos a vernos de aquella manera, aquella manera con la que me miras que me hace sentir que mil mariposas se han apoderado de mi estómago, pero luego te giras, como si yo no estuviera ahí y entonces una bomba explota dentro de mí y esas mariposas mueren..
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