+ Tenía miedo de que ya no me mirases como siempre.
En ciertas ocasiones, el miedo resulta ser nuestro mejor amigo, porque evita que cometemos una estupidez. Pero, la mayoría de las veces, nos frena a intentar cosas nuevas y a tomar las oportunidades que nos regala la vida. No tiene nada de malo cambiar y salir de vez en cuando de la rutina. A veces, ni siquiera nosotros mismos sabemos lo que nos gusta y queremos, y para poder "descubrirlo", tenemos que arriesgarnos, dejar el miedo de lado y no pensar tanto en lo que podría pasar si tomamos una decisión, simplemente di "lo haré" y todo saldrá bien.
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